El destino del Mundo

Dios creó nuestra historia y a ÉL nos debemos

sábado, 18 de abril de 2020

LA CONDUCTA DEL CRISTIANO

Es muy fácil que un cristiano ,en su afán de servir a Dios se deje llevar por una serie de tareas y deberes y caiga en la trampa de salvarse por obras creyendo que ya está libre de pecado.
Es muy fácil cambiar una forma de vida feliz ,gozosa y emocionante de vida cristiana por una relación aburrida en la que se cumplen las ordenes divinas más por temor que por placer.
Pero no debemos de olvidar que nuestra relación de vida cristiana con Dios no debe de ser de obediencia rígida ; sino de amante entrega a un Padre amoroso y bueno con el cual debemos servirle con gozo y poder obedecerle sin miedo.

 Me gustaría  pensar que el cristiano  no recibe ordenes de Dios,sino que dentro de su corazón le hes marcado una obediencia por impulsos de amor  porque ya tiene inscritas en su corazón las tablas de la ley del amor de Dios.

La obediencia del verdadero cristiano a Dios debe venir marcada por una conducta intachable de perfección ,porque el amor de Dios lo constriñe (obligación a hacer algo que le dicta su corazón) a ello.
Existe una falsa concepción del temor de Dios porque el verdadero temor de Dios surge cuando conocemos que el Eterno ama incondicionalmente ,que está dispuesto a dar con Jesús, todas las demás cosas.Verdaderamente si conceptuamos un sano temor a Dios así nace en nosotros un despertar y espíritu de adoración,respeto y profundo amor, un deseo de temor por lo correcto,por darle gloria y complacerlo desde dentro de nuestro corazón.

El apostol Pedro descubrió el perdón y el amor de Dios sirviéndole como motivación para cumplir la ley de Dios.
(1Pedro 1:14,18,19)
"Como hijos obedientes, no os conforméis a los deseos que antes teníais estando en vuestra ignorancia; sino, como aquel que os llamó es santo, sed también vosotros santos en toda vuestra manera de vivir;......con la sangre preciosa de Cristo ".

Asi como Pedro descubrió como conducirse al Señor; recuerda que la fe y la esperanza están fundadas en Dios.

Querido hermano cristiano: que tu vida refleje la conducta del amor de Cristo escrito en las tablas de tu corazón; ese es mi deseo.






Un saludo
Eliseo Cuesta

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