El destino del Mundo

Dios creó nuestra historia y a ÉL nos debemos

domingo, 14 de julio de 2019

La Salud Universal

Isaías 56 

    Recompensa de los que guardan el pacto de Dios

    56 Así ha dicho Jehová:
    «Guardad el derecho
    y practicad la justicia,
    porque cerca de venir está mi salvación
    y de manifestarse mi justicia.»
    Bienaventurado el hombre que hace esto,
    el hijo del hombre que lo abraza:
    que guarda el SABADO para no profanarlo,
    y que guarda su mano de hacer lo malo.
    Que el extranjero que sigue a Jehová
    no hable diciendo:
    «Me apartará totalmente Jehová de su pueblo»,
    ni diga el eunuco:
    «He aquí, yo soy un árbol seco.»
    Porque así dijo Jehová:
    «A los eunucos que guarden mis SABADOS,
    que escojan lo que yo quiero
    y abracen mi pacto,
    yo les daré lugar en mi casa y dentro de mis muros,
    y un nombre mejor que el de hijos e hijas.
    Les daré un nombre permanente, que nunca será olvidado.
    Y a los hijos de los extranjeros
    que sigan a Jehová para servirle,
    que amen el nombre de Jehová
    para ser sus siervos;
    a todos los que guarden el SABADO para no profanarlo,
    y abracen mi pacto,
    yo los llevaré a mi santo monte
    y los recrearé en mi casa de oración;
    sus holocaustos y sus sacrificios
    serán aceptados sobre mi altar,
    porque mi casa será llamada
    casa de oración para todos los pueblos.»
    Dice Jehová el Señor,
    el que reúne a los dispersos de Israel:
    «Aún reuniré en él a otros,
    junto con los ya reunidos.

lunes, 8 de julio de 2019

¿Qué dice la Biblia acerca de orar por los muertos?



Respuesta: 
Orar por los muertos no es un concepto bíblico. Nuestras oraciones no tienen relevancia a alguien una vez que él (o ella) ha muerto. La realidad es que, en el momento de la muerte, el destino eterno está confirmado. Es salvo por la fe en Cristo y está en el cielo donde está experimentando descanso y gozo en la presencia de Dios, o está en tormento en el infierno. La historia del hombre rico y Lázaro el mendigo nos proporciona una vívida ilustración de esta verdad. Jesús claramente usó esta historia para enseñar que después de la muerte los injustos son eternamente separados de Dios, que recuerdan su rechazo del Evangelio, que se encuentran en tormento, y que su condición no puede ser remediada (Lucas 16:19-31).

A menudo, las personas que han perdido un ser querido son animadas a orar por aquellos que han fallecido y por sus familias. Por supuesto, debemos orar por los afligidos, pero por los muertos, no. Nadie debe creer que alguien puede ser capaz de orar por él, así efectuando algún tipo de resultado favorable, después de que haya muerto. La Biblia enseña que el estado eterno de la humanidad está determinado por nuestras acciones durante nuestra vida en la tierra. "El alma que pecare, esa morirá… la justicia del justo será sobre él, y la impiedad del impío será sobre él." (Ezequiel 18:20).

El escritor a los Hebreos nos dice: "Y de la manera que está establecido para los hombres que mueran una sola vez, y después de esto el juicio." (Hebreos 9:27). Aquí entendemos que no se puede hacer ningún cambio en la condición espiritual después de su muerte — ya sea por sí mismo o a través de los esfuerzos de los demás. Si es inútil orar por los vivos que están cometiendo "un pecado de muerte" (1 Juan 5:16), es decir, un pecado continuo sin buscar el perdón de Dios, ¿cómo podría la oración para aquellos que ya están muertos ser de beneficio para ellos, puesto que no hay ningún plan post-mortem de salvación?

El punto es que cada uno de nosotros tiene una sola vida, y somos responsables de cómo vivimos esa vida. Otros pueden influir en nuestras decisiones, pero en última instancia, debemos dar cuenta por las decisiones que tomamos. Una vez que acabe la vida, ya no hay más opciones que escoger; no tenemos otra opción más que enfrentar el juicio. Las oraciones de otros pueden expresar sus deseos, pero no cambian el resultado. El tiempo para orar por una persona es mientras él o ella vive y todavía existe la posibilidad de que su corazón, actitudes, y comportamiento sean cambiados (Romanos 2:3-9).

Es natural tener un deseo de orar en momentos de dolor, sufrimiento y la pérdida de sus seres queridos y amigos, pero sabemos los límites de la oración válida revelados en la Biblia. La Biblia es el único manual de oración oficial, y enseña que las oraciones por los muertos son inútiles. Todavía encontramos la práctica de orar por los muertos observada en ciertas áreas de la "Cristiandad". La Teología Católica Romana, por ejemplo, permite oraciones tanto a los muertos como en favor de ellos. Pero las autoridades Católicas incluso admiten que no hay ninguna autorización explícita para oraciones en nombre de los muertos en los sesenta y seis libros de las Escrituras canónicas. En cambio, apelan a los libros apócrifos (2 Macabeos 12:46), la Tradición de la iglesia, el decreto del Concilio de Trento, etc., para defender la práctica.

La Biblia enseña que aquellos que se han rendido a la voluntad del Salvador (Hebreos 5:8-9) entran directa e inmediatamente en la presencia del Señor después de la muerte (Lucas 23:43; Filipenses 1:23; 2 Corintios 5:6, 8). ¿Qué necesidad tienen, entonces, para las oraciones de la gente en la tierra? Mientras nos solidarizamos con quienes han perdido seres queridos, debemos tener en cuenta que "ahora [es] el tiempo aceptable; he aquí ahora el día de salvación" (2 Corintios 6:2). Mientras que el contexto se refiere a la edad del evangelio como un todo, el verso es adecuado para cualquier persona que no está preparada para enfrentar lo inevitable: la muerte y el juicio que sigue (Romanos 5:12; 1 Corintios 15:26; Hebreos 9:27). La muerte es final, y después de eso, ninguna cantidad de oración proveerá una persona de la salvación que él ha rechazado en la vida.









lunes, 1 de julio de 2019

MI MADRE


Doy gracias a Dios por haberme dado una madre tan buena.
Hay momentos en la vida que la demostración de los sentimientos son necesarios ,somos hechos a imagen y semejanza de ese Dios que todavía no llegamos a conocerlo profundamente pero que sin embargo nos dá cada dia pruebas de ese amor tan grande que no cabe en este mundo.
Desde chiquito he sentido la presencia de este Dios a través de unos padres con dones mas allá de lo normal; un padre capaz de reconocer que hay cosas muy importantes en que no pueden pasar por alto, una madre que ha sido capaz de aguantar estos envites de la vida ,con paciencia ,perseverancia y una sonrisa que  trasmitía paz para seguir adelante.
No cabe duda que la venida del Señor es inminente y pronta.
Señor Jesús tu que transformarte la muerte en vida te pido el encuentro con mis padres en esa resurrección; porque quiero ver a ese padre maravilloso y a esa madre con esa sonrisa de gran paz ;
y es ahora el momento de recordar a esa mujer que por mediación del Espíritu Santo me concibió y me dió la vida .

Quiero en ese recuerdo imborrable que me viene a mi mente dar las gracias a esa madre (Romana) porque un día fuiste a Juarros de Voltoya  (Segovia) y conociste al que seria tu cónyuge y formaste una familia.  Dios en el Eden formo la Familia ( el prototipo para todas las generaciones venideras)

Recuerdo de niño como mi padre cantaba y creaba coplas ,y que mejor homenaje que esta canción  para la madre mas buena del mundo.
Nos vemos en la eternidad por la gracia de Dios.







































https://www.youtube.com/watch?v=A04dcavt8DQ